El Museo del Prado “retoca” sus obras maestras por el cambio climático

La pinacoteca madrileña se asocia a la conocida ONG internacional WWF para explicar visualmente las desgracias que traería el aumento de temperatura.

Parece una tontería, porque en verdad un grado y medio (o sea, 1,5º) es una cifra baja, pero en términos de temperatura global, #LoCambiaTodo. Y no lo pongo como si fuera hashtag porque pueda, que también, sino porque ha sido la etiqueta que han usado el Museo del Prado y la ONG internacional WWF (la que tiene un logotipo muy mono con un oso panda) para intentar concienciar sobre el cambio climático. Y para cualquier amante del arte –o que se enorgullezca de disfrutar de una buena exposición- deberá funcionar.

 

 

Ha sido durante la pasada Cumbre del Clima en Madrid de la que tantísimo se ha hablado pero que medidas, como tales, más bien pocas. Y eso que los cuadros que han escogido para llevar a cabo la idea son de cuatro maestros: Velázquez, Goya, Sorolla y Patinir. Vamos, eso sí, a tranquilizar a la pipol, porque obviamente los cuadros originales están intactos y todo se ha llevado a cabo digitalmente, aunque la verdad es que una pegatina o una proyección en 3D hubiera sido increíble, pero eso cuesta mucho dinero y no es tan importante el cambio climático para gastarse más dinero, sospechamos.

Javier Solana, el presidente del Real Patronato del Museo del Prado, aseguró que era “una excelente manera de transmitir a todos, y especialmente a las generaciones jóvenes, lo que está realmente en juego en esta lucha contra el cambio climático”. “Queremos aprovechar la oportunidad para enviar un mensaje de acción a todo el mundo a través del lenguaje universal que es el arte”, puntualizó Juan Carlos del Olmo, secretario general de WWF España.

Y para ello se pusieron en contacto con la agencia de publicidad CHINA, que llevaron a cabo el desarrollo creativo bajo la supervisión de especialistas del museo. Pero la labor de divulgación ha ido a más, continuándose en las redes sociales, puesto que esos 1,5º serían el momento inflexión que han puesto los científicos y expertos como punto de no retorno: si se sube esa temperatura, las consecuencias son impredecibles.

Únicamente se intuyen, como el caso del ‘Felipe IV a caballo’, el retrato que hizo Diego Velázquez del monarca y que en esta campaña aparece, como La Tierra si no cambian las tornas, con el agua al cuello. Pero más allá de más o menos inspirados e ingeniosos juegos de palabras, lo cierto es que con ese grado y medio de más “el nivel del mar podría aumentar hasta un metro de altura, obligando a millones de personas a desplazarse porque desaparecerían sus pueblos y ciudades”, explicaban desde la ONG.

el nivel del mar podría aumentar hasta un metro de altura, obligando a millones de personas a desplazarse porque desaparecerían sus pueblos y ciudades”

WWF

Algo similar a la propuesta de concienciación a través de Francisco de Goya. El genio aragonés veía cómo los dos jóvenes protagonistas de su cuadro costumbrista ‘El quitasol’ cambiaban sus caras felices y amorosas por rostros llenos de tristeza y desesperación dado que se habían convertido en “refugiados climáticos”, dado que “habría fenómenos del clima extremos y más de 1.000 millones de personas” se tendrían que desplazar.

Como campaña de concienciación está muy bien porque a mí ya me tienen convencido, pero aún así faltan un par de ellos, que, casualmente, van relacionados. El primero es seguramente el más sencillo de pensar por obvio, pero no por ello de menor gravedad. La ONG y el Prado se ponen de acuerdo en que, de aumentar la temperatura solo un grado y medio (es importante recordarlo), “aumentarían las sequías amenazando ríos y cultivos en el mundo”, quedándose sin agua ‘El Paso de la Laguna Estigia’ de Joachim Patinir.

Y, en el último caso, ‘Los niños en la playa’, de Joaquín Sorolla, se divertirían rodeados de peces muertos o coleando dado que a +1,5º “se elevaría la acidez del mar, afectando a grandes poblaciones de peces y hasta el 90% de los arrecifes de coral podrían desaparecer”. Lo dicho, que LO CAMBIA TODO. Sin hashtag, sí, pero con mayúsculas.